¿Y qué te puedo cobrar?

lunes, 7 de enero de 2008

Con qué intensidad detesto a los tipos que por tener un oficio por todo lo demás respetable y útil (plomero, electricista, pintor, albañil) se aprovechan de sus potenciales clientes cuando los enccuentran en estado de necesidad extrema.

Un caso fuera de todo límite razonable es el de los cerrajeros. Estos filibusteros pueden cobrar literalmente cualquier cosa por abrir una puerta en una emergencia (por ejemplo, nos dejamos la llave adentro). Y saben que estamos atrapados. Y se aprovechan. Y lo disfrutan. Y uno les paga, porque se trata de tipos que saben donde vivimos y pueden abrirnos la puerta aunque la tengamos cerrada con llave.

Buenas noches.

Lo detestó Bugman a las 10:51 p. m. 5 detestaron